FOTO ANTIGUA DEL DEPÓSITO DE SANTA ENGRACIA
El depósito de agua de Santa Engracia (hoy sala de exposiciones) fue construido en 1907 por los ingenieros Diego Martín Montalvo, Ramón de Aguinaga y Luis Moya Idígoras (padre del arquitecto Luis Moya Blanco constructor de la Universidad Laboral de Gijón), para posibilitar que el agua llegase a los últimos pisos de los edificios, y a pesar de que el recinto en el que se ubicó fue vallado en todo su perímetro, esta genial obra de arquitectura e ingeniería, se ubicó, aislada, y fuera de la valla, en la acera de la calle de Santa Engracia con lo cual se podía admirar su espléndida arquitectura en toda su extensión.
Cuando la Comunidad de Madrid decidió utilizar el obsoleto depósito para un uso expositor, aprovechó la ocasión para fagocitar el edificio y lo rodeó con una valla de igual diseño que la preexistente que rodeaba al edificio, que en un principio fue transparente, formada por barrotes ligeros, e incluso se plantó arbolado para ocultarlo aún más.
Y hace unos pocos años, no contentos con estas actuaciones de apropiación y ocultamiento, decidieron blindar toda la perimetral valla de barrotes de hierro del enorme recinto, que ocupa casi totalmente una manzana entera, con unas gruesas placas de acero que ya no permitieran ninguna mirada hacia el interior ni siquiera para leer los carteles del pequeño jardín botánico que con ánimo didáctico se plantó todo a lo largo de la valla que da a la calle de Bravo Murillo cuando en aquellos lejanos tiempos se urbanizó el lugar al ejecutar la traída de aguas a Madrid.
¿Y porqué se ejecutan estas actuaciones? ¿Quién libra ese dinero? ¿A qué responde todo esto?. Si se les preguntase a los directivos del canal de Isabel II, seguramente que responderían que por "seguridad" pues esta palabra es como la varita mágica que hace decir al ciudadano con la boca muy abierta y sin entender nada : ¡Ah!. Pero hay otras muchas razones: hay empresas constructoras, talleres de herrajes, empresas de traslados, empresas de seguridad,.......muchas cosas ocultas....y ¡obras son amores! con las que se forran algunos. Y nadie en estos tiempos ha mentado nunca las palabras derroche o despilfarro pues estos señores han sido elegidos ¿? democráticamente y ya no tienen que dar explicaciones.
Esta actuación es paralela a la que en estos momentos está realizando el museo municipal con el edificio del antiguo hospicio. Son metáforas ideológicas de apropiación, para ir preparando el terreno para la que va a venir: En este caso concreto del Canal de Isabel II, que depende de Esperanza Aguirre, nada más ni nada menos que su privatización, con la cual, en un futuro próximo nos venderán el agua, no como un bien de primerísima necesidad, sino al precio que digan los mercados y ya conocemos cómo son los mercados.